Glenmorangie ha elaborado su whisky de malta desde 1843, cuando el granjero William Matheson y su esposa Anne siguieron sus sueños y fundaron la destilería Glenmorangie. Sus fabricantes de whisky han estado soñando con maravillosos whiskies en el mismo lugar, desde entonces.
Es el nombre gaélico del sonido de Islay, que separa la isla de Jura. Para algunos, la pronunciación de la destilería es tan remota como su ubicación, ubicada en la escarpada costa este, donde ha permanecido oculta a la vista desde 1846.
El whisky Cardhu fluye como la conversación de una excelente compañía. Estos personajes suaves, dulces y melosos, extraídos de las aguas suavizadas por la turba de las colinas de Mannoch, son el compañero esencial de cualquier anfitrión vivaz.
Los orígenes de este whisky escocés mezclado se remontan al siglo XIX y es un arte que han ido perfeccionando desde entonces. Porque mezclado es mejor, en vida y en escocés.
Los orígenes de este whisky escocés mezclado se remontan al siglo XIX y es un arte que han ido perfeccionando desde entonces. Porque mezclado es mejor, en vida y en escocés.
Durante más de 200 años, Ardbeg se ha fabricado en la pequeña y remota isla escocesa de Islay. Algunas personas viajan a Ardbeg por la sinuosa carretera de Port Ellen. Otros siguen su olfato, su destino o el consejo de un buen amigo.
En 1887 los propietarios de las bodegas Sánchez Romate empiezan a elaborar un brandy diferente y único para consumo privado. Su calidad impulsa pronto una fama creciente y la bodega decide comercializarlo con el nombre de Cardenal Mendoza.
En 1887 los propietarios de las bodegas Sánchez Romate empiezan a elaborar un brandy diferente y único para consumo privado. Su calidad impulsa pronto una fama creciente y la bodega decide comercializarlo con el nombre de Cardenal Mendoza.
Un brandy de cualidades únicas y origen legendario.
El brandy Gran Duque de Alba es espíritu de vino. Su materia prima es el resultado de la destilación de buenos y equilibrados vinos, y su proceso de envejecimiento el mismo que el de los vinos de Jerez.
Los orígenes de este whisky escocés mezclado se remontan al siglo XIX y es un arte que han ido perfeccionando desde entonces. Porque mezclado es mejor, en vida y en escocés.
Desde principios de 1928 hasta la actualidad, el espíritu de superación y la búsqueda de la excelencia se han materializado en sus diferentes tipos de brandy. Sus brandies han ganado numerosas distinciones y premios internacionales.